Hasta 1976 la selección argentina no tuvo escudo, este llegó de la mano del periodista deportivo y diseñador gráfico Norberto «Toto» Rud.
El disparador de todo esto fue la televisión blanco y negro. En el televisor blanco y negro solamente se veían colores claros. Si jugaban dos equipos con camisetas de colores claros era difícil distinguirlos. Había que ponerle un escudo a la camiseta para identificar los equipos. «Toto» notó que Alemania 74´, la gran mayoría selecciones tenían escudo por esta misma razón.
En 1976 le propone esta idea a la AFA, y le envía cartas con diseños de escudos entre ellos prediseños del escudo elegido.
A fines de noviembre de 1976, Alfredo Cantilo, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino, acepta su sugerencia y afirma que los jugadores empezarían a utilizar el escudo que él había propuesto.
Pocos días después, el equipo de Menotti en un amistoso contra la Unión Soviética (hoy Rusia), estrenaba el flamante distintivo.
A diferencia de otros que han cambiado rotundamente su fisonomía, el escudo de la selección argentina es prácticamente igual al diseñado en 1976. El diseño original era como el que tiene ahora nuestra camiseta, pero en su momento fue bordada sin los laureles dado que no había la tecnología para hacerlo.
En 2004, al escudo de la selección Argentina se le añadieron dos estrellas, en referencia a los títulos mundiales de 1978 y 1986.